Siempre he dicho que Facebook es una red social para conocer la información diaria de las agencias de noticias, especialmente de agencias como la NASA, CERN, DARPA, etc. Y para el contacto entre personas. No la utilizo para colgar fotografías de mi vida privada, aunque en ocasiones no puedo escapar a que otros lo hagan con sus vidas y la mía.
Facebook es para mí una herramienta de trabajo que me informa, diariamente, sobre las manchas solares, los descubrimientos de ciertos laboratorios, instituciones y Universidades a las que estoy adscrito, las investigaciones que se realizan y determinados sucesos mundiales que considero de interés – volcanes, meteoritos, asteroides, terremotos y extraños fenómenos atmosféricos -, todo esto y algunos comentarios interesantes de mis amigos; al margen, no dejo que nadie interrumpa en la red de mis páginas, los convierto en Spam.
Dicen dos investigadores del Departamento de Mecánica e Ingeniería Espacial de la Universidad de Princeton, que Facebook tiene los días contados y que, de 1.200 millones de usuarios que tuvo en su pico máximo, en 2012, estos descendieron, hasta el punto que en diciembre de 2013 tenía un 20% menos. Basándose en esta curva estadística, los investigadores, auguran (no afirman), que en 2015 o 2017 Facebook habrá perdido un 80% de usuarios.
Se basan en un estudio denominado Modelo epidemiológico en la dinámica de las redes sociales, haciendo una desafortunada comparación de las enfermedades, gripe, con la utilización de las tecnologías, sin considerar que esta última es emergente y que Facebook tiene la mitad de las visitas a través de aparatos móviles con, cada día, más aplicaciones que no han previsto. Por otra parte estos expertos consideran que las búsquedas de Facebook son todas por Google, sin considerar los nuevos servidores que surgen, especialmente en China, India y países árabes.
Creo que el hecho de comparar la red social Facebook con la evolución de una epidemia como la gripe, es mezclar ingredientes completamente diferentes como las fórmulas magistrales de las antiguas farmacias. Las enfermedades tienen sus ciclos y las tecnologías los suyos y cualquier comparación tendría que considerar miles de variantes distintas. Creo que no se ha considerado que algunos métodos de análisis llevan a conclusiones muy disparatadas. Destacaba mi profesor de estadística que las circunstancias y el lugar pueden ser los mismos, pero el tiempo siempre será diferente.
La caída de Facebook, si es que existe, se debe más a la crisis mundial, que ese descenso de un 3% de los usuarios que se produjo el último trimestre es consecuencia de la necesidad de ahorro de muchos ciudadanos del mundo. De cualquier forma sólo tendremos que esperar unos pocos meses para confirmar si estos expertos tienen razón, y su diagnóstico es exacto aunque hayan mezclado la crisis económica, con las enfermedades epidémicas, la sociología, la tecnología, psicología y los ciclos históricos.
Facebook se ha apresurado a contestar a la Universidad de Princeton, y ha utilizado una metodología, en forma de burla, titulada Desacreditando a Princeton. En ella destaca que Princeton tiene menos “me gusta” en Facebook que Harvard y Yale, y que desde el año 2000 el número de búsquedas en Google sobre Princeton había caído.
Con estos datos los técnicos de Facebook sugieren a “que la tendencia es que Princeton tendrá sólo la mitad de sus matrículas actuales en 2018 y en el 2021, carecerá de alumnos”.