En el canal Historia de la T.V., presentaron el pasado domingo un documental sobre el “Libro secreto” del presidente de los EE.UU. Afirmaba este documental que existe un “Libro secreto” que va pasando de presidente a presidente en el que cada uno escribe los más íntimos secretos de Estado, secretos que sólo saben los presidentes. Secretos como quién mato a Kennedy, si se existen los Ovnis y se ha contactado con ellos, se existe un arma total secreta. Acontecimientos que no han trascendido a los ciudadanos en general. Y dan al presidente un poder de conocimiento.
Creo que se trata de otra leyenda urbana, no creo que exista este libro, ni que se pase de presidente a presidente.
A lo largo de toda la historia siempre han existido libros secretos y de poder. El primero de ellos lo poseía Carlomagno, tenía el nombre de Echiridion y que contenía una revelación primitiva universal, en la que se explicaban todos los secretos de la naturaleza. No se sabe que fue de este libro y si su existencia es o no una leyenda.
Se habla que el alquimista Michael Scot también tenía un libro de poder, con fórmulas misteriosas, que le otorgaba el gran conocimiento que tenía. También desapareció este libro.
Otro libro de poder lo tenía Nicolás Flamel, a quien le fue anunciado en sueños por un “ángel” y que, más tarde, compró en una vieja librería. Al parecer era un libro judío conocido como Aesch Mezareph, pero también está desaparecido.
Nostradamus también tuvo acceso a un libro de poder que le fue mostrado por los monjes de la abadía de Orval, un libro arcano que había sido donado por Godofredo de Bouillón. Tampoco se sabe dónde está.
Finalmente destacaré el libro de poder que tenía el Papa Silvestre II, una obra calificada de abominable por los que le rodeaban, lleno de fórmulas mágicas. Tras el asesinato de este Papa, la obra despareció.
Así vemos que las leyendas urbanas sobre libros de poder o secretos han existido desde hace tiempo. Hoy, lamentablemente, el único libro de poder es la chequera.