Voy a recomendar algunas normas sobre lo que debe cumplir un escritor al presentar un proyecto de libro a un editor.
En ocasiones no es necesario presentar todo el libro elaborado, sino un proyecto inicial al que, el editor, puede dar su visto bueno y aceptarlo con o sin pre-contrato. Puede que el editor nos solicite el desarrollo de algún capítulo antes de decidirse, o que quiera ver la obra terminada sin garantizarnos su aceptación. Son situaciones que dependerán de la importancia del autor, los libros realizados anteriormente, y lo conocido que sea. Algunos autores prefieren terminar la obra y entregarla, otros prefieren presentar un proyecto y si está aceptado realizar el libro.
En cualquier caso veamos una serie de normas para presentar un proyecto de libro de ensayo, narrativa, divulgación, enseñanza o autoayuda, la novela y poesía quedan excluidas de estas normas:
- Hay que ser lo más breve y concreto posible. Los editores tienen muchos proyectos y van escasos de tiempo. Aconsejo alrededor de cinco folios como mucho en la presentación de los puntos siguientes.
- Un breve curriculum vitae con mención de obras anteriores, citando editoriales y número de ejemplares vendidos. Aspectos personales relacionados con el tema que se va a tratar. Nuestra experiencia en ese campo y fuentes de información que disponemos.
- Una introducción de menos de un cuarto de folio sobre el tema del libro. Ya nos extenderemos más en el índice general.
- Un razonamiento comercial del interés que puede tener el libro entre los futuros lectores y a quién va concretamente dirigido. Este punto es importante ya que estamos tratando de explicar al editor que posibilidades comerciales tiene el libro en el mercado.
- Todos estos aspectos no deberían sobrepasar los dos folios, con el fin de poder dedicar dos o tres folios más al desarrollo del índice.
- El índice lo abordaremos capítulo por capítulo explicando su contenido. Para ello, cada capítulo llevará un título que debe ser atractivo y con gancho, así como una breve y concreta descripción de su contenido. Debemos cuidar este apartado, ya que el editor valorará nuestra capacidad de estructurar la obra, nuestra originalidad en las titulaciones, y tendrá una idea de todo el contenido.
En ocasiones, las Editoriales, me han pasado libros para conocer mi opinión sobre su contenido y su rigurosidad. A veces los libros eran rigurosos y bien escritos, pero han fallado en su estructura y con ello en su continuidad o encadenamiento entre capítulos. La estructuración merece su tiempo y atención. A las Editoriales no les gusta reestructurar, precisa tiempo y cuesta dinero.
Finalmente busque consejo en otros escritores amigos y acepte las sugerencias del editor en cuanto a temas estructurales, capítulos que deberían añadirse y capítulos que deben desaparecer. Trate al editor como un amigo, en el fondo él quiere que usted triunfe y sea famoso, ya que ganará más dinero y prestigio.