Asteroides y Amos del mundo.
El sabotaje en la nave Soyuz MS-9 acoplada a la ISS, es consecuencia, tal vez, de la oscura guerra que se está desarrollando en la trastienda del mundo de la astronáutica donde hay importantes intereses y, especialmente, el dominio de la Tierra.
Rusia viene sufriendo diversos percances en su industria espacial. Perdida de naves de carga tipo “Progress” y varios cohetes tipo “Proton” que ponen en órbita sus satélites artificiales. Se enfrente a la agresiva competencia de la industria espacial privada americana que ofrece unos precios muchos más baratos en sus lanzamientos, empresas como SpaceX o Amazon con sus cohetes reutilizables Falcon Heavy y Blue Origen respectivamente. Un mundo competitivo en el que ESA ha tenido que reconsiderar los precios de sus futuros Ariane 6, y en el que ha entrado China con sus cohetes “Larga marcha” y su propia estación espacial, y no podemos olvidar Japón con sus cohetes Java explorados de asteroides, o la India. Por ahora Rusia es una de las formas de volar a la ISS, hasta que entre en servicio el SLS americano con su cápsula para más de tres astronautas, o SpaceX con su módulo-cápsula para 5 o 6 astronautas.
Pero ¿qué hay detrás de toda esta carrera espacial?: asteroides con minerales preciosos y dominio del mundo. Asteroides con agua, que es considerado el petróleo del futuro, ya que las moléculas de agua se pueden romper para generar oxígeno e hidrógeno, que es uno de los combustibles más eficientes. Así tenemos en los asteroides “estaciones de servicio” para las naves espaciales. No es una utopía, empresas como Planetary Resources, Deep Space Industries o Aten Engineering están volcando todos sus esfuerzos en los 18.335 asteroides cercanos de los que el 15% de ellos tiene hasta un 25% de su peso en agua.
Otros de los objetivos reside en el oro, platino, grafeno y otros metales raros abundantes en los asteroides. De esos 18.335 asteroides cercanos a la Tierra, un mínimo de 50 son capaces de convertir a sus propietarios en “Amos del Mundo”. Hoy el precio del oro es de unos 45.612 $ el Kg., por lo que una tonelada alcanzaría los 45.612.000 $. En la Tierra la producción de oro es de 2.860 toneladas al año, y las reservas mundiales son de 165.000 toneladas. Un asteroides pequeño, 500 metros de diámetro, puede tener 174 veces más oro que la producción mundial. Es decir 497.640 toneladas de oro. Me dirán que hay que extraerlo y traerlo a la Tierra, pues no necesariamente. Puede almacenarse en una especie de Fort Knox del espacio. Su propietario, la empresa espacial minera que lo ha atrapado, lo tiene ahí, en ese Fort Knox, como garantía de sus operaciones bancarias en la Tierra, convirtiéndose en el “amo del mundo”.
La carrera espacial no es por conquistar el espacio, es por dominar las finanzas de la Tierra con las riquezas minerales del espacio.